martes, 20 de julio de 2010
TESTAMENTO
lunes, 19 de julio de 2010
LOS SUEÑOS
LA BANDURRIA DE VICENTE
domingo, 20 de junio de 2010
EL FEISBU ESE...
viernes, 21 de mayo de 2010
JUGANDO
martes, 18 de mayo de 2010
BUEN VIAJE
miércoles, 5 de mayo de 2010
LA HABITACION
martes, 13 de abril de 2010
MI CANCIÓN FAVORITA
lunes, 12 de abril de 2010
QUIÉN SABE...
LUGARES
domingo, 21 de marzo de 2010
A OSCURAS
sábado, 27 de febrero de 2010
UN PAÍS DE PANDERETA
En eso se ha convertido, por desgracia, nuestro país. A día de hoy, no sé qué podemos exportar culturalmente allén de los mares, cuando hemos convertido en estrellas mediáticas a personas cuyos méritos para ello han sido ser madre de la hija de un torero o haber hecho el cafre por internet con videos que sólo enseñan violencia y una preocupante carencia de valores.
Es algo que muchos hemos pensado en algún momento, pero que jamás creímos que podría llegar a tocar el último extremo de la desfachatez. Y es que lo sucedido en la gala de Eurovisión recientemente, donde un personaje nos ha retratado para Europa con una actuación de la que no pienso dar publicidad con links o fotos, ha servido para derramar por fin el vaso y preguntarnos hacia dónde vamos.
Hace años, para salir en televisión, había que ser famoso por algo profesional. Había que ser cantante, gran comunicador, humorista, pintor, etc. Con un currículum que lo acreditara. Hoy en día, uno se hace famoso gracias a la televisión y, para acceder a ella, uno debe contar cuál es el currículum que tiene en su entrepierna, ya sea hombre o mujer.
Me da pena ver cómo este país degenera en una república bananera en la que la educación, cada vez más, brilla por su ausencia. Sólo espero que estos días tan grises para todos aquellos que tenemos dos dedos de frente, lleguen a su final porque si no es así, rezaré para que los augurios de Roland Emmerich en su última producción se cumplan cuanto antes.
jueves, 18 de febrero de 2010
ERES...
miércoles, 17 de febrero de 2010
ME ESTOY HACIENDO VIEJO
lunes, 8 de febrero de 2010
SIGO AQUÍ
viernes, 8 de enero de 2010
TENGO GANAS
… De correr hasta caer sobre alguna llanura extenuado y, una vez esté tendido en el césped, mirar al cielo, sonreír e imaginar que todo lo malo no existe. Que sólo son pensamientos provocados por el miedo pero que siempre estarán lejos de convertirse en realidad.
… De ser capaz un día de reírme por la calle a carcajadas sin un motivo aparente y que la gente no consiga hacerme parar con esas miradas que tienen lugar cuando alguien simplemente disfruta siendo feliz.
… De andar por la arena mojada y, de repente, lanzarme al mar con ropa y sumergirme sin que la ropa me importe más que ese chispazo de felicidad momentánea que nos recorre el cuerpo cuando el agua salada nos cubre por completo.
… De meterme en una fuente aunque esté prohibido y bañarme hasta que la policía se canse de esperarme fuera para, si es necesario, llevarme esposado a la comisaría. Después, una vez allí, poder escaparme de la sanción argumentando felicidad provocada por no se sabe el qué.
… De correr a casa de quien me desvela, tocar a su puerta, plantarle un beso y, en caso de que por inesperado, no me lo corresponda, salir corriendo con esa sonrisa que todo niño travieso dibuja en su cara cuando hace alguna maldad inocente y sana.
… De poder perdonar a todos aquellos que en su día me clavaron el puñal mientras me abrazaban y de conseguir el perdón de todos aquellos a los que, sin querer o queriendo, lastimé creyendo que no estaba mal o que me sentiría mejor.
… en definitiva, de ser feliz. Y sé que este año, lo voy a conseguir aunque las orejas del lobo intenten amedrentarme. El destino me dará las cartas y jugaré mi mejor partida para que, cuando acabe el año, el balance sea positivo. ¿Te apuntas?













